HORA DE FRONTERA EN MATAMOROS

domingo, 17 de julio de 2011

¡Dejar de luchar es comenzar a morir!

"Estas palabras le despertaron una esperanza por la vida. Todavía casi sin fuerza, logró preguntarse: ¿Qué me paso? ¿Por qué he dejado de utilizar mis facultades, de comunicarme a mí misma, de razonar, de autocriticarme, de orientar mis actos y de tomar decisiones? ¿Por qué me he dejado llevar por los instintos y las emociones? Debo recuperar el equilibrio. ¡Necesito actuar! Salir de mi crisis. Es preciso que utilice esa voz interior con la que he aprendido a comprender y a enriquecerme; ella representa mi oportunidad de intimar, reflexionar, y conocer en forma sincera, mis conceptos, valores y decisiones de vida.
Decidió salir de su crisis. Lo intentó varias veces, por diferentes caminos. Analizó las posibles acciones para superarla. Comenzó a reevaluar sus acciones y decisiones, a cuestionarse, a cambiar sus actitudes y a reorientar su búsqueda.
Hasta que, al fin, logró entender conscientemente lo que deseaba y podía realizar conforme a su naturaleza y circunstancias.
Y ratificó su reto: llegar a la cima de la montaña. Este reto le permitió renovar el equilibrio y recuperar su honor. Dignidad y orgullo. Sintió dentro de sí un nuevo amanecer.
Decidió actuar. Levantó su vuelo con seguridad, Salió por la ventana del granero. Volvió otra vez a las tormentas y a los vientos, pero esta vez…con una nueva actitud, hacia sí misma y hacia la vida.
Descubrió que las crisis son algo doloroso y difícil, pero sublime; algo que afirma y desarrolla el espíritu de las águilas. Y a que los vientos, a las tormentas y a las corrientes de la vida. Es necesario desafiarlos, para que nos ayuden a sostener y elevar nuestro vuelo. Decidió desafiarlos integrándose a ellos. Segura y decidida, el águila voló a la búsqueda de la montaña, dispuesta a conocerla y retarla.
Al llegar a ella, la contempló y admiró su belleza. También reflexiono sobre su conquista: comparo los obstáculos, riesgos y desafíos al escalarla, con las decisiones de nuestra vida cotidiana, con los problemas que es necesario superar para lograr una vida plena de realizaciones.
La montaña significo para ella la vida, la visión, el coraje y las oportunidades. Despertó en su interior un reto a su propia existencia. Deseo ardientemente llegar a la cima.
Consciente de su realidad, comenzó a actuar con mayor seguridad, gozaba de la altura, los vientos y las corrientes. Empezó a jugar: revoloteaba, cantaba y hasta remedaba a las otras águilas, en una actitud abierta, dejando así que sus sentimientos brotaran sin negarlos.
¡Buscaba ser única, diferente y l ibre!"
FUENTE: "La Búsqueda"
AUTOR: Alfonso Lara Castilla
Un frase para recordar: "Cuando la lucha de un hombre comienza dentro de sí, ese hombre vale algo" Robert Browning

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Se prohibe mensajes ofensivos, denigrantes o de cualquier índole que causen incomodidad o molestia a otros usuarios. Gracias.

Campaña Corazón Azul